A pesar de que el porcentaje de mujeres que obtiene un título universitario es mayor que el de los hombres su presencia en el campo de la investigación científica a penas se acerca al 30%.
Son múltiples los aspectos implicados en esta realidad pero, sin duda, uno de los más destacados es la falta de referentes en los que reflejarse por parte de las niñas y jóvenes.
El año pasado desde el Ayuntamiento de Torres decidimos hacer nuestra pequeña aportación para paliar esta situación con la programación de dos actividades:
La primera de ellas consistió en un Taller de Experimentos Científicos para niños dirigido por un grupo de mujeres científicas del CSID. El segundo evento que organizamos fue el: I Encuentro de Mujeres Científicas Torresanas, un interesante coloquio con mujeres de nuestro municipio que trabajan en el ámbito científico donde analizaron las principales dificultades a las que se enfrentan las mujeres para desarrollarse en este sector.
Todas las participantes estaban de acuerdo en la importancia de la educación para lograr la Igualdad en este sector.
Este año la situación no nos permite programar este tipo de actividades, sin embargo, hemos querido coger el testigo de nuestras científicas y poner el foco en la educación para contribuir a la igualdad de género en el ámbito científico. Analizando los fondos de nuestra biblioteca municipal hemos encontrado una gran desigualdad, si bien es cierto que, en los últimos años se han editado varios libros dando a conocer a importantes mujeres en este ámbito, todavía estas publicaciones son muy minoritarias en nuestras estanterías.

En el Día Internacional de la Niña y la Mujer en la Ciencia el Ayuntamiento se compromete a aumentar el número de fondos bibliográficos sobre mujeres científicas, tanto en la sección infantil- juvenil, como en la de adultos.
Como bien decía Margarita Salas, la científica española más reconocida; “La vocación científica no nace, se hace”.